Translate

Seguidores

viernes, 30 de septiembre de 2011

Rigor

"Impiadoso rigor de la sequía" reza el inusual titular de la portada de hoy de un diario de tirada nacional. Además de las reminiscencias borgianas en esa calificación de la sequía, trae el titular algunas ideas de la importancia del clima en la economía y en nuestra vida.
Tantos años de industrialización, de enajenación de la naturaleza, o de una naturaleza entendida como paisaje, nuestra verdadera condición sigue siendo una condición agraria. El alimento, el pan nuestro de cada día sigue siendo el elemento fundamental de nuestras sociedades.
Cuesta pensar lo que puede ser alimentar a una familia numerosa, no se puede imaginar tener que alimentar a una ciudad, a una nación. Hoy tenemos que alimentar a 7.000 millones de personas, que en virtud de nuestra humanidad, nacen con derechos y con expectativas. Ya no bastan los ghettos ni los telones de olvido. El propio éxito de nuestras sociedades, el incremento de la esperanza de vida, la disminución de la mortalidad infantil, todo contribuye a esa ingente labor de alimentación. El crecimiento de China, los sorprendentes datos de reducción de la pobreza, todo conspira con el clima para que de nuevo la cosecha sea el elemento crucial del año, el que determina la felicidad de la tribu o el que genera la desbandada y la migración.
Al fin y al cabo, con algunas aportaciones tecnológicas, con nuevas semillas y algunos procedimientos ingeniosos, todo sigue dependiendo de las lluvias, del clima, de los planetas o de los dioses. Posiblemente el calificativo de "impiadoso" cuadra más a los dioses que a los planetas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario